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Pere Servià i Cantó wur-de die Res­taurierung von Pals mit privaten und staatlichen Mitteln ermöglicht.

Der in Barcelona lebende Arzt Dr. Pi i Figueres stammte ursprüng-lich aus Pals. Er erwarb das Grund-stück, auf dem einst das Kastell von Pals gestanden hatte, und baute sich in altem Stil ein ro-mantisches Wohnrefugium.

Wir folgen den Stadtmauern. Vier markanteWachtürme sind noch er-halten und von Tauben bevölkert. Wir landen auf dem Aussichtsplatz „Mirador Josep Pla“. Der Schrift-stellers Josep Pla beschrieb Pals und speziell diesen Platz in sei-

este emplazamiento, como lu-gar mágico. Desde aquí se disfruta de una vista maravillosa, por toda la plana del Bajo Ampur-dán y sobre el mar hasta las islas Medes. La tramuntana coge pro-tagonismo y dibuja un paisaje de película. Huímos de la tempestad y de los primeros grupos de turistas y nos refugiamos del viento en el cas-co histórico. La iglesia de Sant Pere es una mezcla de barroco, románi-co y gótico. Hay partes originarias del año 944. En su in­terior reina lo sencillo, quebrantado únicamente por los ornamentos coloridos de los ventanales.

Siempre regresamos con gran pla-cer a Pals. Incluso bañado con los

nen Werken als magischen Ort. Von hier hat man einen tollen Blick auf die Ebene des Baix Empordà weit über das Meer bis hin zu den Medes-Inseln. Ein bizarrer Kaktus reckt seine leuchtenden Blüten in den blauem Himmel. Der Tramun-tana fegt heute über das Land und malt uns eine strahlende Bilder-buchlandschaft. Wir füchten vor dem Sturm und der ersten lauten Reisegruppe zurück in den Wind-schatten der Altstadt.

Die Kirche Sant Pere ist eine Mi-schung aus Barock, Romanik und Gotik. Teile stammen aus dem Jah-re 944. Innen herrscht Schlichtheit, unterbrochen von den farbigen Or-namenten der Kirchenfenster.

colores del ocaso, Pals sigue sien-do mágico y como bien afrmaba Josep Pla: “Pals radía colores de albaricoque con el sol poniente”. El nombre de Pals (del latín palus) signifca “zona pantanosa”. Anti-guamente, Pals estaba rodeado de pantanos y lagos. Hoy en día, se ven grandes superfcies comple-tamente secas y sembradas; entre otros productos, se cultiva arroz. Pals no sólo está cercado de cam-pos de arroz, sino también de va-rios campos de golf. El Golf Platja de Pals se inauguró en 1968 como el primer campo de golf de Espa-ña. Las vecindades de Els Masos de Pals y Sa Punta (Playa de Pals) pertenecen a Pals. La playa de are-